¿Crees que eres intolerante a la incertidumbre? Analicemos juntos este concepto e intenta identificar algunos factores claves en tu personalidad. Recuerda, esta es solo una guía para ayudarte a controlar mejor tus emociones.

Si algo sabemos de la vida es que es no tenemos certeza de nada o, al menos, es imposible hacerlo si no tienes una bola mágica que te cuente sobre tu futuro. Hay muchas situaciones en nuestra vida que no vemos venir y es normal que para algunas personas se presente como un foco de ansiedad y estrés, pues no se promueve de manera constante que es imposible tener todo bajo control y que hay que buscar en todo momento soluciones puntuales y rápidas. 

La tolerancia a la incertidumbre es justamente eso, es aprender a lidiar con la falta de certezas y de soluciones en el momento, a no tener nada dentro de nuestros planes y aún así, aceptarlo de la mejor forma posible dentro de nuestra vida. Siempre tratamos de resolver todo, lo cierto es que a veces es imposible porque no depende de nosotros la situación. Por más que busquemos respuestas, las soluciones muchas veces llegan con el tiempo y otras, sencillamente, es imposible hallarlas. 

¿Qué pasa con las personas que tienen baja tolerancia a la incertidumbre? 

Normalmente estas personas tienden a experimentar algo llamado “el cierre cognitivo” es lo que comúnmente conocemos como “la última palabra”. Profundicemos un poco más en este concepto ¿te parece?.

Este hace referencia a las personas que necesitas como respuesta un “sí” o un “no” rotundo, es decir, que definan de una vez por todas la situación. Esta característica normalmente hace que las personas sientan mucho estrés y ansiedad ya que las cosas no salen como ellos esperan. ¿Me quieres o… no me quieres?  Ante este tipo de preguntas, ellos quieren un “sí” o un “no” pues les cuesta creer en respuestas más realistas frente a cada situación, en pocas palabras, para ellos no existe un gris o es blanco o es negro. 

Además… sí, ya sé lo que piensas, para este tipo de personas es inaceptable las paradojas o las ambigüedades.  No lo ven como una realidad que tiene lugar, sino como una mentira, un engaño o un mecanismo para encubrir la verdad. Lo extraño aquí es que, podríamos afirmar, que en lo humano todo es muy ambiguo o ¿tu qué opinas?

¿Cómo se manifiesta? 

• Ante una situación inesperada te sientes angustiado e inquieto porque no tienes una respuesta al instante.
• No aceptas la inexistencia de una respuesta concreta y empiezas a experimentar ansiedad.
• No analizas minuciosamente los hechos de la situación, por lo que no comprendes por qué es tan complejo llegar a una solución o una respuesta definitiva.
• Curiosamente, tus decisiones y juicios, se muestran más seguros.
• Le das vueltas a aquellas situaciones que te preocupan sin llegar a un fin razonable.

Por desgracia, la comodidad de tener la certeza sobre cada situación de la vida no es una necesidad para el ser humano porque el mundo está lleno de sorpresas, unas buenas y otras no tanto. Recuerda que tus preocupaciones son solo pensamientos, trata de no darles profundidad y distrae tu mente en algo que te guste como ver una película, leer un libro, jugar con tu mascota o cocinar.Es lo mejor que puedes hacer. 

Espero que este artículo te haya ayudado a identificar algunas actitudes que tomamos cuando no toleramos la incertidumbre. Compártelo con todos aquellos que les pueda llegar a ser útil y cuidemos entre todos nuestra salud mental. Bendiciones.